20.4 ºC  Junín, Bs As |
En la obra de ficción Canción
de Hielo y Fuego, las estaciones tienen una duración enormemente variable,
y las razones de esta disonancia no están del todo claras; puede ser por la
posición y el movimiento del planeta de esta novela en las esferas celestes,
por culpa de la magia que impregna la realidad de esta obra o por cualquier
otra razón o combinación de las mismas, lo cual parece guardar similitudes con
lo que ocurre con las criptomonedas; es un mercado que tiene criptoveranos y
criptoinviernos de duración extremadamente imprevisible y, si nos atenemos a
las previsiones de algunos analistas, las razones por las que desencadenan o
terminan son muy difíciles de comprender.
Y es que precisamente en este momento bitcoin, y por lo
tanto el resto del mercado del cual la criptomoneda de Sathosi Nakamoto
representa un porcentaje muy grande, parecen encontrarse experimentando su
particular invierno, el cual no se sabe cuánto puede durar ni cuál será el
evento que termine por desencadenar su final si es que se produce, aunque por
supuesto existen multitud de analistas opinando al respecto.
De la Luna a la Tierra
Siguiendo un recorrido inverso al de los aventureros de la
popular novela de Julio Verne, las criptomonedas han pasado de terminar el 2021
con unas expectativas realmente optimistas, hasta el punto de que algunas
predicciones esperaban superar con mucho el máximo histórico marcado por
bitcoin el año pasado, pero la realidad de la economía ha terminado por truncar
estas expectativas para bajar la cotización total del mercado por debajo del
billón de dólares, con lo que el mercado en su conjunto ha llegado a perder
hasta dos tercios del valor que llegó a tener hace no tantos meses, por lo que
intentar comprender en la medida de lo posible estos fenómenos es fundamental si se
pretende invertir en bitcoin, ya sea comprando esta criptomoneda o sin
comprarla ni venderla a través de un bróker online utilizando el apalancamiento,
herramienta que es necesario conocer en profundidad por los altos riesgos que
implica.
Si bien existen analistas que se oponen frontalmente a las
criptomonedas y opinan que este derrumbe de los precios ha sido el estallido de
una burbuja y la entrada de este mercado en una fase terminal, lo que supondría
de facto que este invierno sería para siempre en el mejor de los casos y el
comienzo del final en el peor, existen otros que creen que este invierno
criptográfico tendrá un final como ocurrió en pasadas ocasiones, quizás dentro
de año y medio con la llegada de un nuevo halving en la red de bitcoin o quizás
dentro de tres años, opinión de algunos inversores en base a inviernos
anteriores, aunque la experiencia con las criptomonedas es tan corta y la situación
actual tan excepcional que todo análisis debe tomarse con mucha precaución,
algo recomendable siempre que se invierte, al igual que la máxima de no
invertir nunca más que el dinero que uno pueda permitirse perder.
Y es que la inflación, la guerra, y la subida de los tipos
de interés del dólar parecen haberse conjurado para descapitalizar el mercado
de las criptomonedas y por lo tanto bajar mucho su precio desde los máximos
históricos, algo que ciertos inversores ven con una enorme desconfianza mientras
que otros aseguran estar aprovechando para comprar monedas con las que holdear al menos
hasta que pase el chaparrón, aunque los holders irredentos opinan que la
acumulación de criptomonedas debe ser indefinida, algo que se empieza a poner
en tela de juicio entre algunos de los holders más tibios, dado que si no
aprovechan los máximos para obtener beneficios en fiat o puede que en forma de
stablecoins que luego reinvertir o incluso gastar ¿de qué sirve invertir en
criptomonedas? A no ser que se considere que las criptomonedas terminarán por
sustituir de forma definitiva al dinero fiat en el medio plazo, algo que
todavía parece muy lejos de convertirse en una realidad material.
En cualquier caso el criptoinvierno parece una oportunidad
ideal para formarse en todo lo relacionado con las criptomonedas de cara a la
hipotética llegada de un criptoverano, al fin y al cabo las criptomonedas son
un mercado todavía muy inmaduro y que en caso de prosperar podría tener un gran
potencial de crecimiento, aunque también es cierto que al menos de momento es
un mercado de muy alto riesgo.