"Ariel Gómez": el seudónimo de Diego Maradona cuando estuvo internado en Olivos
Diego Maradona se llamó "Ariel Gómez" mientras estuvo internado en la Clínica Olivos, donde fue operado por un hematoma subdural y dado de alta el 11 de noviembre del pasado.
De un día para otro, de estar monitoreado por aparatología médica y cámaras de seguridad durante 24 horas, y medicado contra el síndrome de abstinencia alcohólica, Diego pasó a la soledad, sin controles, encerrado en una habitación y consumiendo alcohol y marihuana en una casa del barrio privado de Tigre, donde más tarde falleció.
Esa información consta en la documentación que está en manos de los profesionales que integran la junta médica que deberá resolver cómo y por qué falleció el mejor jugador argentino de la historia.
En la historia clínica 348244 consta que Diego se llamó "Ariel Gómez", y que tras la intervención quirúrgica por el hematoma subdural "crónico", padeció "síndrome de abstinencia alcohólica y de drogas no indicadas médicamente".
Según consigna ese parte médico, Maradona se encontraba en una situación que "configura por su característica riesgo para su vida y la de los demás", por lo que "se debe iniciar tratamiento con drogas sedantes parenterales". Los médicos y las hijas estaban al tanto de ello.
El neurólogo Leopoldo Luque y la psiquiatra Agustina Cosachov (a quienes en la clínica se los identifica como "de cabecera"), mantuvieron una reunión con los facultativos del nosocomio Pablo Dimitroff y Fernando Villarejo.
"Todos los presentes entienden los riesgos a los que se expone el enfermo y se explica claramente que por las características del paciente también hay riesgos de no tener éxito inmediato" en el tratamiento, consigna el informe.
El tratamiento implicaba riesgos: "la administración de drogas, aún a dosis controladas con monitoreo adecuado, pueden deprimir la conciencia y el drive respiratorio de modo que el paciente pueda necesitar apoyo respiratorio y asistencia nutricional".
También explica que "debido a que el paciente se interna involuntariamente, los médicos de cabecera y las hijas asumen los riesgos de la internación bajo estos términos para no tener que judicializar el proceso de internación".
El tratamiento debía ser largo, a punto tal que los médicos del sanatorio informaron a la familia, a Luque y a Cosachov, que "no se puede presumir a la fecha el tiempo que demandará lograr controlar el proceso de abstinencia".
Maradona estaba atado a la cama, con controles de micción, pañales para incontinencia, acompañado 24 horas por familiares y personal de seguridad propio, con controles asentados en la historia clínica hora por hora y vigilado por cámaras de seguridad internas.
Pese a la gravedad de su cuadro y el pronóstico incierto sobre la evolución de su cuadro aún en esas condiciones de cuidados intensivos, fue externado el 11 de noviembre de 2020; el 25 de ese mismo mes murió por causas que investiga la Justicia.