La dirigente de la de la Corriente Socialista de las y los Trabajadores (CST) de Perú, Cecilia Quiroz, contó a minutouno.com que ya no se admiten adultos mayores en las unidades de terapias intensivas. El país ya supera los 93 mil contagios por coronavirus Covid-19.

“El presidente (Martín Vizcarra) tomó el caso desde el principio con una actitud positiva y optimista, creyendo que la cuarentena como única medida iba a ayudar a prevenir el contagio masivo. Esta estrategia no está llevando a eso”, aseguró Quiroz y agregó: “Tenemos más treinta y cinco profesionales de salud que han fallecido, y esto nos llena de preocupación”.

En el mismo marco, sostuvo que los adultos mayores mueren abandonados porque ya no son aceptados no sólo en las guardias médicas, que se encuentran colapsadas, ni en las unidades de cuidados intensiva (UCI).

“El sistema de salud está colapsado. Es cierto que no se debe solo a la responsabilidad de este gobierno, sino que desde los años '90, cuando se instaló el neoliberalismo se fue abandonando la salud pública llegando hoy a estos resultados. Hoy pagamos las consecuencias”, advirtió la referente sobre la crisis por el coronavirus Covid-19 en Perú.

En referencia al cuidado de los profesionales de la salud en medio de la pandemia de coronavirus, la dirigente denunció que el Estado “no entrega los elementos de protección necesarios para su cuidado” y agregó que: “Ya no tenemos respiradores artificiales, ni siquiera mascarillas de protección hay”.

En este contexto, esta semana se llevó a cabo en todo Perú un reclamo de enfermeras para que se le entreguen elementos de protección contra el coronavirus Covid-19 se entregan cada quince días y los deben usar de igual porque no hay suministros.

“Es muy triste lo que estamos pasando”, sentenció sobre la situación del coronavirus en Perú, al tiempo que admitió que situación económica empeoró desde la instauración oficial del confinamiento y sin ayuda oficial. En el vecino país, más del 70% de los trabajadores son informales y no están siendo contemplados en su totalidad por el Estado.

En ese sentido, amplió: “Al margen de las actividades esenciales, la mayoría de los trabajadores no tienen ningún tipo de sustento”. Esta situación conlleva que muchos de ellos, que en su mayoría se dedican a la venta ambulante, no respeten la cuarentena y salgan a las calles a vender elementos de protección sanitaria, como mascarillas y tapa bocas contra el coronavirus.

Quiroz agrega: “El Gobierno solo otorgó un bono equivalente a 120 dólares que no alcanza a cubrir a los doce millones de trabajadores informales”. El bono otorgado por el Gobierno sólo alcanzó para seiscientos mil trabajadores. “Todos los demás quedaron afuera, y a la deriva”, insistió.

La crisis en Perú por el coronavirus, según la dirigente, excede lo sanitario: también se extiende a una crisis social, y económica: “Los trabajadores tienen que elegir entre quedarse en sus casas, o salir a la calle con los riesgos que ello implica, a vender algo para poder subsistir con lo mínimo necesario”.

Por otra parte, la dirigente de izquierda asegura que desde el gobierno se habilitó “el gatillo fácil y el permiso para poder reprimir sin ninguna responsabilidad ante la inminente posibilidad de protestas sociales”.

En la misma línea, el presidente de la Sociedad Peruana de Medicina Intensiva, Jesús Valverde, asegura que el colapso de los hospitales en Lima ha generado que los médicos de las UCI asuman una fase selectiva, en la que evalúan la capacidad de recuperación de un paciente con COVID-19 frente a otro para elegir al que atenderán en dicha área.