La Cámara de Diputados de la Nación rechazó hoy el Decreto de Necesidad y Urgencia 565/2024, que aumentaba los fondos reservados para el funcionamiento de la SIDE, con 156 votos a favor del rechazo, 52 en contra y 6 abstenciones.

La sesión fue convocada por los bloques de Encuentro Federal, la Coalición Cívica y parte del radicalismo liderado por Facundo Manes y Martín Lousteau. El quórum se alcanzó apenas 17 minutos después de las 12 horas, con la presencia de 82 diputados de Unión por la Patria, 16 de la UCR, 11 de Encuentro Federal, 6 de la Coalición Cívica, 5 de la Izquierda, 5 del PRO, 2 del MID y 2 de La Libertad Avanza.

Llamó la atención la presencia de 5 diputados del PRO y 2 libertarias de La Libertad Avanza, que se sumaron al quórum. Sin embargo, se ausentaron los diputados cordobeses alineados con el gobernador Martín Llaryora y Francisco Morchio, referente del gobernador Rogelio Frigerio.

Durante la votación, el radicalismo se mostró dividido, con 24 votos a favor del rechazo, 7 en contra y 3 ausencias. Rodrigo De Loredo, uno de los ausentes por estar de viaje, expresó en su cuenta de X su preocupación por la falta de claridad sobre el destino de los fondos asignados por el DNU.

Previo a la sesión, Mauricio Macri reunió a la dirigencia del PRO y sugirió que los legisladores bajaran a dar quórum y votaran en contra del decreto firmado por Javier Milei. La cuenta oficial del PRO en X expresó que, aunque apoyan medidas de cambio, este DNU de $100 mil millones para inteligencia, sin aclarar su uso en un contexto de austeridad, no es consistente con los valores del partido.

El debate fue breve, dado que la oposición ya había acordado rechazar el decreto. Desde La Libertad Avanza intentaron bloquear la votación alegando la falta de dictamen de comisión, pero no lograron apoyo suficiente. Gabriel Bornoroni, presidente del bloque de LLA, pidió tratar el decreto sobre tablas, lo cual requería dos tercios de los presentes, un umbral que no fue alcanzado.

Finalmente, el diputado Oscar Agost Carreño propuso un texto para rechazar el decreto, que fue aprobado. Martín Menem, presidente de la Cámara, explicó que el voto positivo significaba el rechazo del DNU. Ahora, la Cámara de Senadores deberá debatir el DNU 656/2024, y su decisión será crucial para determinar si el decreto queda sin efecto, ya que se necesita el rechazo de ambas cámaras para invalidarlo.