Apenas tres días después de que el Observatorio de la Deuda Social Argentina de la UCA informara que la pobreza en la Argentina trepó al 40,8%, el nivel más alto en los últimos 10 años, la Iglesia reclamó la restitución de "derechos y oportunidades" para quienes no llegan a cubrir sus necesidades más básicas.
El arzobispo de Luján, Jorge Eduardo Schening, formuló este pedido frente al presidente saliente, Mauricio Macri y el presidente electo, Alberto Fernández, en el marco de la "Misa por la unidad y la paz" en el Día de la Virgen.
En su homilía Schening retomó la propuesta lanzada por quien asumirá la presidencia de la Nación el próximo martes y llamó "a lograr entre todos juntos un pacto social". En ese sentido recordó que los pobre perdieron "derechos y oportunidades" en los últimos años y pidió que trabajar juntos para que les sean restituidos.
"Es muy natural que una mamá o un papá se vuelquen al hijo más frágil de la familia, estamos llamados a cuidar de los pobres y eso significa acompañarlos en su vida cotidiana. Servir a los pobres es servir a Jesús y no podríamos no estar al lado de ellos" siguió el arzobispo frente al presidente saliente a quien se lo acusa de haber gobernado durante cuatro años para los ricos.
"Estamos en un momento delicado del mundo, de América latina y de nuestra Nación" advirtió y pidió rezar por "nuestra patria y nuestra América latina, tan diversa y al mismo tiempo tan sufrida, debilitada, enemistada y tan necesitada".
"Todos somos conscientes de que lo que viene no es fácil y para seguir construyendo esta Nación bendita necesitamos de todos, nadie sobra en esta construcción" advirtió y señaló: "Estamos agotados de desencuentros y peleas".