Un niño de casi dos años murió el sábado pasado al entrar a la casa de su familia para salvar a su perro de un incendio que terminó por consumir la vivienda, ubicada en Arkansas, Estados Unidos.
Loki Nicholi Sharp, de 23 meses, logró entrar de nuevo a su casa en Gentry, Arkansas, sin que sus padres lo vieran. El objetivo del niño era salvar a la mascota de la familia, pero fue imposible.
El jefe de Bomberos de Gentry, Vester Cripps confirmó que el incendio se registró a las 17 del sábado en una casa sobre la calle Worthington Road, informó el sitio Democrat Gazette.
La familia Sharp no estaba adentro de la vivienda sino en el jardín, pero en el trajín de pedir ayuda e intentar apagar las llamas perdieron de vista a Loki.
Eventualmente los rescatistas encontraron los cuerpos de los dos, niño y perro.
El origen del incendio habría sido un desperfecto eléctrico, pero el motivo todavía no fue confirmado por la policía.