En la cercanía del Día Mundial para la Prevención del Abuso Sexual contra la Infancia (ASI), que se conmemora este martes, el Programa Víctimas Contra las Violencias presentó un informe que detalla que las denuncias a la línea de Abuso Sexual contra la Infancia (0800-222-1717) entre enero y septiembre de 2019.
El dato importante es que en ese período aumentó un 53,07% respecto a igual periodo de 2018. Entre otros factores, se vincula a la difusión del caso de Thelma Fardin en diciembre pasado.
Entre enero y septiembre de 2019 el Programa, que pertenece al Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación, recibió 3.383 denuncias en tanto que en igual periodo de 2018 había recibido 2.210, lo que representa un incremento del 53,07%.
Esta estadística deja afuera diciembre de 2018, cuando la actriz hizo pública su denuncia por violación contra el actor Juan Darthés junto al colectivo de Actrices Argentinas. Ese mes las llamadas llegaron a 710, mientras que el mes anterior habían sido 396.
"El pico de llamadas en diciembre podría estar relacionado con la denuncia de Fardin y la difusión posterior de las líneas telefónicas de ayuda en los medios de comunicación", analizaron desde el Programa.
Desde el inicio de la campaña "Hablar es empezar a prevenir" (noviembre de 2016) hasta septiembre de este año se atendieron 9.591 casos de abuso sexual de todo el país, que representan 9.990 víctimas.
El 62% de las víctimas (6.200) fueron niñas, niños o adolescentes, el resto fueron adultos que se contactaron por hechos sucedidos en su infancia o actuales. Siete de cada 10 víctimas menores de 18 años fueron niñas y el 50% de ellas menores de 11 años; como en casi todas las pocas estadísticas que existen,siete de cada 10 agresores son personas del ámbito familiar y de éstas el 34% son padres (20%) o padrastros (14%).
La forma más frecuente de victimización sexual es el tocamiento seguido por violación, y se registran casos en que una víctima sufrió más de una agresión sexual.
Sebastián Cuattromo de Adultxs por los Derechos de la Infancia, un colectivo de sobrevivientes de ASI que recorre todo el país brindando sus testimonios, dijo a Telam que en el caso de Fardin confluyeron positivamente dos factores esenciales: el acompañamiento colectivo y un tratamiento correcto por parte de los medios.
"Es un antes y después cuando estas historias se cuentan con una compañamiento colectivo, con una conciencia y una sensibilidad crítica a nivel social en favor de las víctimas y de sus luchas en búsqueda dereparación y justicia y cuando esto tiene su correlato en el tratamiento dela prensa", sostuvo Cuattromo.
Sobre la creación de contextos de posibilidades, Fernando Singman-especialista de Salud de Unicef- sostuvo que "se trata de un delito muy prevalente y muy invisibilizado; hay que dejar de naturalizarlo, y los adultos que trabajan con niños en lugares clave como el ámbito educativo o la salud deben comprometerse y denunciar, pero para eso deben sentirse también acompañados por sus instituciones y por la sociedad".
Tanto Singman como Cuattromo coincidieron en la necesidad de trabajar sobre una implementación adecuada de la Ley de Educación Sexual Integral, lo que "generaría posibilidades de prevención y detección temprana".