El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, calificó hoy en la apertura de sesiones de la Legislatura bonaerense, como un “hecho de inédita gravedad institucional” las declaraciones del presidente de la Nación, quien, según el mandatario bonaerense, amenazó con intervenir la provincia y destituirlo a través de redes sociales. “No se puede ser tan impune, cínico e irresponsable”, sostuvo.

Kicillof cuestionó la actitud del presidente y advirtió que “así como un mandatario no puede avalar una estafa financiera de escala internacional, tampoco puede usar el mandato que le dio la democracia para atentar contra ella”. En ese sentido, reafirmó su compromiso con el sistema democrático y el federalismo: “Desde acá le quiero recordar al presidente que con la democracia y con el federalismo no se juega”.

El gobernador también criticó las políticas económicas del Gobierno Nacional, señalando que “el sector privado se está reduciendo”, con la desaparición de 12.600 empresas, mientras que “el gran ganador es el sector especulativo”. Aseguró que este modelo “resulta injusto, inestable y frágil”, ya que aumenta la concentración de la riqueza y reduce las oportunidades para las mayorías.

En otro tramo de su discurso, Kicillof reclamó la deuda de $9,4 billones que, según él, el Gobierno Nacional mantiene con la provincia de Buenos Aires. “Por estos fondos realizamos siete denuncias ante la Corte Suprema de la Nación. La justicia le tiene que poner un límite a este saqueo ilegal”, enfatizó.

El mandatario bonaerense también resaltó el rol de su gobierno en la protección de derechos y en la contención social y productiva: “Nuestro Gobierno Provincial actúa como escudo para proteger derechos agredidos y como red para atenuar el daño y sostener, en la medida de nuestras posibilidades, el tejido social y productivo”.

En materia de seguridad, Kicillof cuestionó la falta de coordinación con Nación y denunció que el presidente ha rechazado reiterados pedidos de reunión: “Sostiene que no tiene nada que hablar con el Gobernador de la provincia más grande del país”. En contraposición, aseguró que está dispuesto a colaborar con gobernantes de distintos espacios políticos: “Para mí, mejor que tuitear es realizar”.

A pesar de lo que calificó como “ajuste de Nación”, el gobernador destacó la colaboración de Buenos Aires con otras provincias en situaciones de emergencia, como en Río Negro, Chubut y Córdoba, y en el refuerzo de la seguridad en Rosario. “Tengo la carta de la Ministra en la que los solicita y mi respuesta fue sí, por supuesto”, subrayó.

Por último, Kicillof anunció una inversión de $170.000 millones para fortalecer la seguridad en la provincia. Entre las medidas, destacó la incorporación de 800 nuevos patrulleros, la creación de un Fondo Municipal de $70.000 millones para municipios con más de 70.000 habitantes y la construcción de 15 nuevas bases en barrios para mejorar la prevención y la integración comunitaria. También adelantó un paquete de reformas legales para aumentar las penas por tenencia ilegal de armas y agilizar los allanamientos en flagrancia contra búnkeres de droga.

“Para los municipios de menos de 70.000 habitantes, además de asignarles nuevos móviles, triplicaremos el presupuesto del programa de policías comunales”, prometió.