La reparación del frente del Teatro Italiano de Junín, con una inversión cercana a los 11 millones de pesos, ha configurado un anuncio de trascendencia para la vida cultural de la ciudad, por lo que significa el coliseo de calle Rivadavia, cuya inactividad en las últimas décadas ha sido una materia pendiente para la comunidad.

La restauración de la sala insume “millones de pesos” y “nos cuesta dimensionar” lo que significa poner en valor “una sala histórica”, pero es de destacar que “esto no es un hecho que se produce ahora, por generación espontánea, sino el resultado de un largo proceso que fructifica en este momento” manifestó Miriam Luterotti, agente consular de Italia en Junín y presidenta de la Sociedad Italiana.

Señaló que “nadie pensaba que nos iba a encontrar en esta circunstancia (en medio de la pandemia) cunado lleva a pensar que hay otras prioridades relacionadas con la salud, pero son muchos años de trabajo, donde ahora aparece el gobierno de turno, pero esto tiene mucho historia detrás. Hay muchas personas que pusieron su esfuerzo personal a lo largo del tiempo para que ahora podamos ver este logro”.

Hay que recordar que fueron muchas personas y empresas las que, con su aporte, hicieron posible la preservación de este bien.

EN ETAPAS
“El proyecto de puesta en valor del Teatro Italiano está pautado en etapas y se han podido ir cumpliendo gracias a fondos propios, fondos aportados por la comunidad de Junín y otros aportados por el municipio durante la gestión del ex intendente Mario Meoni. Así pudo concretarse el cambio total de la cubierta, con lo que se solucionaron los serios problemas de filtraciones, y la impermeabilización de la caja. Gracias a eso se podrá encarar la tercera etapa, que es la que se iniciará en breve”, indicó Luterotti.

HISTORIA DE PRESERVACION
Destacó que “al ser de la colectividad italiana, venimos de una tradición de no demoler, de preservar para que cumplan su destino final para el que fueron creados”.

“Cuando nosotros asumimos, la sala estaba a punto de transformarse en un bingo, respondiendo a otros criterios de conducción y logramos acuerdos específicos para que su destino final fuera el teatro”.

La sala tiene “una acústica increíble” y, de acuerdo a la opinión brindada por especialistas, constituye “una verdadera joya”.

“CASI AL ORIGINAL”
Los trabajos que se cumplirán próximamente será la puesta en valor que conlleva una restauración denominada grado 2, lo que lleva el frente “casi al original, porque no será simplemente una “lavada de cara”. Se evaluará como está la cubierta. Aún resta intervenir la parte de la sala. Se hará un análisis técnico de cómo está el cielo raso del salón. Allí vendrá un artista capacitado quien dará clases sobre restauración a la gente de la Escuela de Arte”.