Pidió el escudo de Boca y le tatuaron un pene
No era el mejor lugar para hacerse un tatuaje. Pero él, con sus 17 años, no lo sabía y fue con la confianza con la que iban los amigos. Pidió entonces que transformaran su fanatismo por Boca en un tatuaje en su espalda. Con el trabajo terminado, volvió contento a su casa. Aunque no había podido verlo en un espejo, ya sentía la pasión xeneize en su cuerpo y quiso mostrarla a su familia. Recién en ese momento le avisaron que, en realidad, su espalda había sido lienzo para una broma: le tatuaron un pene y dos testículos.
Ocurrió en el barrio Cantera 25, de la ciudad entrerriana de Concepción del Uruguay. El tatuaje no se lo hicieron en un lugar especializado, sino en una casa. "Fue en una vivienda particular habitada por gente que no se dedica a efectuar tatuajes, sino más bien es gente de mal vivir, que le grabaron un tatuaje tipo 'tumbero'", señaló una fuente policial.
No obstante, sin comprobantes ni factura por el servicio realizado –la policía de hecho cree que no pagó por él— el joven inició una denuncia por estafa. Es que no se acostumbra a la idea de tener ese dibujo en su espalda de por vida.
Por la denuncia intervino el juzgado de instrucción 2 de Concepción, que ordenó un allanamiento a la vivienda de los tatuadores.